¿Real o Imaginario?

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

- Tengo la sensación de que te gustará el salón peligro - Murmuró, divertido, escuchando lo que le decía con una sonrisa tenue que luego hizo a su rostro sonrojarse leve cuando el otro le miró de ese modo fijo e intenso. Tenía la impresión de haber visto esa mirada antes pero no lo recordaba con exactitud. Cuando el otro se levantó, el pareció despertar de sus pensamientos, levantandose de repente para salir de allí también. - El lugar queda en este mismo piso - Le dijo - Lamentablemente no puedo llevarte a ver a cerebro porque no tengo acceso. Solo puede manejarlo alguien con dotes mentales, hasta ahora Evan es el único...- Le contó, bajando el Ave Negra para abandonar el hangar - ¿Con que nivel te gustaría empezar el salón peligro? - Le preguntó, retador y suspicaz.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

-Lo sé...sí...había escuchado que solamente los telépatas muy experimentados resisten ese flujo de poder, bueno...de esa magnitud...-Le respondió mientras lo seguía por aquel piso, directos al salón peligro. Cuando entraron miró a su al rededor y solamente parecía un cuarto vacío, hecho de un montón de láminas plateadas y cuadradas, en filas derechitas incluso hasta en el techo. Se encogió de hombros-¿Cuántos hay? ¿Muchos?-Intentó adivinar, tal vez era como generalmente en todos lados: básico, intermedio y avanzado-¿Qué tal si lo pones en avanzado?-Se atrevió a aceptar su desafío con aquella gatuna sonrisa, no podía estar peor que todas las guerrillas entre mutantes a las que se había enfrentado en el pasado...¿O sí?.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

- Pues... unos cuantos la verdad - admitió, para luego escuchar lo que le decía aceptar, asintiendo leve con su cabeza - Bien, como quieras... te diría que no te confiaras pero ya que insistes...- Exclamó para, abriendo un panel en la habitación, ir al centro del control del mismo para configurar el nivel que el otro le decía. Ciertamente aquello era dificil. Él solo llegaba hasta el nivel 7 y eso ya era decir mucho. Comenzó a programarlo en el nivel 10 y, al activarlo, una voz metalica se escuchó po todo el salon.- Activado nivel 10 - se escuchó anunciar a la voz metálica y al minuto siguiente todo quedó a oscuras. Nunca había activado el nivel 10, ni siquiera por curiosidad, por lo que no tenía idea de lo que le esperaba al otro. Esperaba que sobreviviera o, en su defecto, le dijera que lo detuviera.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Rylei se puso alerta en cuanto el bibliotecario desapareció, y cuando la voz se escuchó se encogió en el piso como un animal asechado, mirando a su al rededor con desconfianza, luego las luces se apagaron, pero para él eso no era problema, podía seguir viendo perfectamente. "Inicia la primer secuencia" dijo la voz nuevamente-Qué venga...-Contestó Rylei mientras una sonrisa rebelaba que sus colmillos habían crecido y sus ojos brillaban con ferocidad. De toda la primer fila de cuadros en las cuatro paredes, brotaron cientos de pistolas pequeñas que le apuntaban con sus lasers. El minino saltó justo a tiempo, ya que al mismo tiempo todas comenzaron a dispararle, para todos lados a donde se movía disparaban una especie de choques eléctricos que te paralizaban el cuerpo si te alcanzaban. Una a una las fue destruyendo, con un rayo de energía blanca que disparaba de sus manos, pero no era suficiente, eran demasiadas. Una lo alcanzó y lo hizo caer al piso, rodó a tiempo porque los impactos fueron directo hacia él sin piedad-Demonios...-maldijo, arrancó una placa metálica del piso y la usó de escudo mientras aprovechaba para seguir destruyéndolas. Al fin terminó, agotado y adolorido, pero inmediatamente el estadio tomó su primer escenario, se transformó en un callejón cerrado y oscuro de la ciudad. A su alrededor surgieron muchísimos robots con forma de pandilleros, todos parecían tener superpoderes diferentes y se fueron contra él como una estampida dispuesta a lincharlo a como diera lugar. Tomando innumerables formas de animales enormes y poderosos (como dragones, tigres, jaguares, dinosaurios) Acabó bestialmente con la mitad de ellos, pero estaba ya muy herido y agotado para continuar. Un pedazo gigantesco de asfalto, lanzado por un robot con superfuerza de casi dos metros y medio, le dio en la cabeza y le hizo caer casi inconsciente, perdiendo su transformación-¡Ikuto! ¡Ikuto!-Lo llamó con la poca fuerza que le quedaba en la voz, justo segundos antes de que este lo aplastara...

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

Ikuto observaba, entre aterrado y sorprendido, en lo que se había convertido el salón peligro en menos de un parpadeo. Él no hubiera podido con todo eso y, definitivamente, el otro estaba haciendo un impresionante trabajo intentando evitar todos aquellos lasers y luego a los robots "mutantes". sin embargo, pudo notar que ello superaba sus fuerzas cuando notó que comenzaba a agotarse. Sus ojos se abrieron como platos al ver como arrancaban el concreto para lanzarselo y desactivó el sistema justo cuando estaban por lanzarselo, notando como el otro le llamaba. La habitación volvió a la normalidad, con los sencillos paneles metalicos rodeandola como si lo de antes jamás hubiera existido. Entonces el salió del centro de control, preocupadisimo, para luego acercarse a Rylei, que aún seguía en el suelo, y tomarlo en sus brazos. - Rylei... ¡Rylei! ¿Estas bien? - Exclamó con preocupación. Solo esperaba que no hubiera caido inconciente, realmente debió haber sido bastante duro para él. - ¡Respondeme, Rylei! - Le instó, angustiado, acariciandole el rostro con sus finas manos para atraer su atención.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Rylei no notó que todo volvió a la normalidad, ya que casi vio su vida pasar cuando estuvo a punto de ser acabado por aquel olograma despiadado. Todo se puso negro y se encontró en alguna escena de su pasado, no podía recordarlo con exactitud, sólo tenía la vaga sensación de estarlo viviendo de nuevo. Un angel bellísimo lo sostenía entre sus manos en medio de la nada, todo estaba en blanco menos él, decía su nombre con angustia una y otra vez, "Tranquilo...angel...estoy bien..." Quiso susurrar, pero no encontraba fuerzas para hablar. Cerró los ojos nuevamente. Al abrirlos de nuevo poco a poco fue recuperando la consciencia, era Ikuto quien le hablaba y todavía estaba ahí tendido en el salón peligro...¿Entonces no había muerto? ¡Genial!. Una suave sonrisa se dibujó en sus labios-¿Qué tal lo hice?...-Preguntó con la voz débil, se rió un poco pero le dolieron las costillas así que dejó de hacerlo, quería incorporarse pero no podía, esperaba no estarse desangrando.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

Ikuto se alivió muchísimo cuando el otro finalmente abrió los ojos, mostrándolo con un hondo suspiro que se escapó de sus labios. Lo miró de nuevo y escuchó su pregunta, mirándole por ello con cara de reproche. - Ba–a...- Musitó, acomodándole el cabello que caía en su rostro – No deberías preocuparte por eso después de lo que pasó… ¡Me diste un susto de muerte! – Confesó, mirándolo aún con preocupación, ayudándolo por lo menos a medio sentarse y que quedara apoyado en él. Notaba que tenía algunas heridas en el cuerpo pero, al ser algo holográfico, muchas de ellas en realidad no existían, porque con efectos como esos se podía engañar a la mente con facilidad, aunque si tenía una en el costado, por lo visto allí si le habían alcanzado. – Creo que vamos a tener que llamar a Will…- Murmuró – Aunque pueda evitar que te desangres, me preocupa que tengas algo mas serio…- Le miró a los ojos – Fuiste demasiado osado, Rylei…- Señaló, más su rostro aún lucía angustiado por el rubio.

Rylei se rió de nuevo un poquito pero puso una mueca de dolor y se sostuvo la barriga apoyando una mano detrás de su cintura en el piso, para sostenerse ya que aún estaba algo mareado. Apoyó su cuerpo en el del bibliotecario, como si se refugiara en su pecho, era una escena tierna-Lo siento...-Contestó desviando la mirada, con las mejillas levemente rojas-Pensé que saldría librado...pero en verdad que si es un reto...esta cosa...es emocionante-Aseguró, todavía entusiasmado-¿Viste como maté a los últimos? De un tiro...¡Fue magnífico!-Se tentó con las manos donde le había dolido antes pero descubrió que tenía menos heridas de las que pensó, sólo se encontraba verdaderamente agotado.-Estoy bien...no debes preocuparte tanto...-Le aseguró, y sus orbes color miel se fijaron en las suyas, por momentos olvidó que no debía hacer eso, ya que podía darse cuenta de lo de que "Tigre" y él, eran él mismo, pero le gustaban mucho sus ojos, y con esa expresión afligida eran todavía más hermosos.

Notó que intentar “reprenderle” era definitivamente un caso perdido. Por lo visto el otro encontraba “divertido” aquello, a pesar de la angustia que a él le generó. Suspiró de nuevo y negó con la cabeza levemente, escuchando sus palabras. - ¿Cómo no voy a preocuparme? – Inquirió – Si estabas bajo mi cuidado, y encima pensé… que…- Sus palabras se quedaron en el aire al notar la manera tan intensa en que el otro le miraba. Sus orbes claras parecieron perderse en las suyas un instante, después de todo el otro tenía unos ojos realmente llamativos. Se sonrojó adorablemente sin darse cuenta ante esa mirada insistente, pero pronto terminó desviando la suya por pura vergüenza, aunque sin dejar por ello de sostenerle entre sus brazos. – Pensé que realmente estabas herido…- Murmuró por lo bajo, aun con esa visible vergüenza – Habrá que llevar a curarte…- Señaló cuando pudo mirarle de nuevo - ¿Crees que puedas caminar o…?-

-¿Bajo tu cuidado? Pero si no soy un chico del instituto...-Protestó en voz baja, pero sonriendo enternecido por aquello, bajando la mirada, hacia tiempo que no se sentía vulnerable ante nadie, era una sensación muy cálida, aún más porque se trataba de Ikuto. Lo sacó de sus pensamientos lo último que dijo-Oh...bueno, eso creo, sólo ayúdame a levantarme...-Poco a poco recuperaba sus fuerzas, pero era complicado si seguía sangrando así, por lo que procuró hacer presión en su herida aunque doliera, estaba acostumbrado a ello, así que como si nada intentó caminar con pasos más o menos firmes, para que el bibliotecario, que lucía algo frágil, no tuviera que cargar él solo con todo su peso-¿Es muy lejos de aquí la enfermería?-Preguntó por saber a que se atenía, y para distraerse también.

- Igual me preocupaste…- Admitió, sonrojándose de nuevo para luego asentir a sus palabras y ayudarle a levantar con cuidado hasta dejarle más o menos firme en el suelo, pero de igual modo temió por su herida. Ante sus palabras, asintió suave con su cabeza.- Pues algo lejos… Por eso te decía si podias caminar… O puedo enviarle un mensaje a Will para que venga hasta aca abajo – Señaló – No creo que tarde demasiado, pero igual deberías sentarte, te noto algo pálido…- Exclamó, tomándolo de la mano para hacer que se sentara en el suelo de nuevo, acomodándolo en la misma posición de antes.- A ver, déjame hacer algo por tu herida…- Dijo, cerrando los ojos un instante, concentrando sus poderes en el estado liquido de la sangre para contenerla dentro de su cuerpo, pero de manera cuidadosa para no detener el resto del flujo sanguíneo. – Creo que así ya no va a sangrar más…- Suspiró – ¿Le envio un mensaje a Will que venga entonces?-

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Al rubio le gustaba que lo tratara de aquel modo, se sentía mimado pero a la vez culpable por ello mismo, por dejar que el otro creyera que era débil, cuando lo que quería demostrarle era lo contrario-Tranquilo, no es tan serio...-Le dijo una vez más, sin embargo no opuso resistencia cuando lo ayudó a sentarse otra vez, ya que quería sentir de nuevo esa calidez que había entre sus brazos y sobre su pecho...-Quédate así...-musitó de forma inconsciente, cerrando los ojos con suavidad, mientras el bibliotecario estaba tratando de ayudarlo con su control del agua. Momentos después volvió a abrirlos de pronto, ya que se sintió más recuperado ahora que había dejado de sangrar-Pues...de acuerdo...si es la única forma en la que te quedarás tranquilo-Fijó sus ojos en los suyos y le sonrió con suavidad.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

Se quedó así un rato más al escuchar sus palabras, aunque le hizo sonrojar el hecho de le pidiera aquello de ese modo. El otro tenia una apariencia muy fiera pero tambien podía ser, por lo visto, muy candido. Le acarició suavemente algunos mechones de cabello hasta que de nuevo abrió los ojos, notando que los fijaba en los suyos, haciendole sonrojar aún más, más le sonrió suave ante aquello. - Computadora, envía un mensaje a Will. Que baje, tenemos un herido - Se escuchó en respuesta un "De Inmediato¨ en una voz metálica y luego todo volvió a ser silencio. Volvió entonces su atención de nuevo al otro y le miró suspicaz. - Así que... ¿Te conviertes en animales, no? Es un interesante poder...- comentó - ¿Tienes algun otro? - Preguntó, con curiosidad. Con la tensión del momento ni siquiera se le había ocurrido pensar que el otro pudiera ser su querido "Tigre".

El minino casi se estremeció cuando mencionó sus poderes, pero sólo con darle un vistazo rápido a sus ojos supo que no lo decía con la intención que se temía, así que volvió a suspirar con alivio y le contestó-En realidad...solamente esos...¿Rayos? con los que destruí las armas de los lasers...reflejos superhumanos y...sientidos aumentados...según me dijo...la chica del pelo rosa...¿Es la directora?...creo que sí...es que...se ve tan joven-Lo hicieron sonreír de nuevo las incoherencias que estaba diciendo-Deberías evitar que siguiera hablando, creo que ya dije muchas tonterías seguidas...-Seguía sintiendo que las cosas a su al rededor se mecían, a pesar de eso trató de no recargarse tanto en él-Lo siento...¿Peso?...es que estás tan...cómodo...-Cerró los ojos con suavidad nuevamente.

- Si, ella es la directora. Se llama Kandra - Le explicó - Ha sido muy buena con todos nosotros, así que en cierto modo la queremos. De no ser por ella y por Chris, de seguro aún estaría en la calle o... ¿Quien sabe donde? - Inquirió, encogiendose de hombros y acariciandole los cabellos, escuchando primero lo de sus tonterias y luego lo que le decía. - ¿Sabes? Aunque me vea delicado sigo siendo hombre, así que puedo soportar tu peso, deja de precuparte si? - Le calló los labios con su índice de manera delicada - Deja de hablar y solo descansa. Seguro Will llegará en cualquier momento...- Musitó, sonriendole delicadamente. No podía evitar estar sonrojado porque el rubio tenía algo que llamaba poderosamente su atención, no sabía que era, pero hacía que de repente el corazon le latiera deprisa al observarlo y mimarle como lo hacía, aprovechandose de su debilidad.

Le causó mucha risa su especificación de que era hombre, ¡Por Dios! Pero si ni siquiera se había dado cuenta conscientemente que lo había estado tratando todo ese tiempo como a una mujer. Iba a disculparse con él, pero entonces lo calló de esa forma que también le dio un suave color rojizo a sus mejillas. No replicó nada, solamente esquivó su mirada con discresión, ya que tuvo la sensación de que volvería a perderse en su mirada si sostenía el contacto visual por más tiempo

En ese momento llegó Will, entró volando con sus impresionantes alas por la puerta automática que se abrió sola cuando el sensor lo detectó-¿Qué le pasa? ¿Está grave?-Se apresuró a preguntar, aterrizando justo a lado del herido, en cuclillas para quedar a su altura y poder examinarlo mejor. Velozmente tomó sus signos vitales y se inclinó para escuchar su corazón.

- Bueno, esta bien, no es tan grave... Pero tiene una herida en el costado y habría perdido mucha sangre si yo no estuviera aqui...- Señaló, luego de verlo entrar de aquella manera tan magnífica. Sino lo conociera de verdad habría pensado que se trataba de un ángel. - Tiene algunos razguños aqui y allá como vez, pero la mas importante es la herida del costado - Comentó - Quizo caminar a la enfermería pero lo vi debil y le obligué a quedarse, espero no haber causado problemas - Murmuró viendo de reojo al recien llegado, sosteniendo aún a Rylei en sus brazos.

-No, claro que no...que bueno que no lo hiciste caminar, seguramente se habría desmayado en el camino-Sacó una linterna del bolsillo y chequeó la reacción natural de sus pupilas para comprobar que seguía lúcido-¿Puedes escucharme?...-Sonrió muy apenado al notar que no sabía de quien se trataba-Oh...una disculpa a los dos pero...no sé tu nombre, ¿Cuál es?-Le hizo esa última pregunta a Ikuto, para que el otro no se esforzara en contetsarle.

-Sí...te escucho y te veo...un poco borroso pero...no está tan mal-

-Es que has perdido mucha sangre, es natural...-Le contestó Will con aquella sonrisa angelical tan deslumbrante-Ahora voy a revisar que no tengas derrames internos, tal vez te duela un poco...-

-No te preocupes...no pienso ponerme a llorar-Le aseguró, pero se pegó un poquito más contra ikuto cuando empezó a tentarlo con firmeza en donde localizó marcas de golpes, como afortunadamente no le quedaba mucha ropa, fue fácil

-No...todo parece estar en orden excepto tu costado y estos rasguños que están un poco profundos, pero fuera de eso no hay nada grave-Le fue diciendo el diagnóstico, más a ikuto que a Rylei

- Si, eso mismo fue lo que yo pensé...- Exclamó, sin interrumpir demasiado al angel para que pudiera trabajar y revisar con tranquilidad al herido bajo su cuidado. Cuando preguntó aquello, de inmediato respondió. - Se llama Rylei... Bennet si mal no recuerdo - Murmuró - Es uno de los amigos de Andrew, el hermano de Kyle, y Jer... el peliazul ese que le lanza chispitas a la fuente - Soltó una risa ligera al recordarlo, mientras veía a Will revisarlo. Cuando se pegó un poquito más a él, le cobijó entre sus brazos sin problema alguno e incluso le acarició un poco el cabello para mantenerlo calmado. - ¿Podrás curarlo ahora? ¿Vendas, sutura, que le haras? - Preguntó con curiosidad.

-Él mismo...un placer-Confirmó en son de broma las descripciones de Ikuto, y se resistió a toda costa de ponerse a ronronear antes aquellos toques a su cabello, por lo que procuró parecer indiferente ante ellos, a ver si así dejaba de hacerlo aunque veía ello algo difícil.

-Yo soy Will Kenneth...el enfermero del instituto...el placer es mío-Se presentó también el ángel mientras buscaba una pequeña daguita en su ropa-¿Vendas? O no, nada de eso...no va a ser necesario...-Observó la herida-Ya puedes dejarla fluir, no te preocupes, yo la modularé, pero necesito que esté libre...-le respondió al peliplata

- ¿Seguro? Bueno, si tu lo dices...- Exclamó, y deshizo la contensión de la sangre que había estado usando para que el otro no fuera a desangrase o algo parecido, teniendo que dejar las caricias a un lado para concentrarse, tratando de poner un poco más derecho a Rylei para que Will pudiera trabajar mejor. Ahora que lo pensaba, nunca había visto a Will curar a nadie. - Ehm... ¿Te ayudo? - Le preguntó, no muy seguro de si lo necesitaba.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Will se rió de su pregunta-jeje...está bien, sólo necesito que lo sostengas firmemente, esto tal vez si le duela mucho...-Dijo mientras se cortaba la orilla de la muñeca, y procedía a derramar unas cuantas gotas de su sangre sobre la herida de Rylei.

El rubio tembló levemente al sentir aquella sangre, era como si primero le hubiese ardido la piel y ahora estuviera infiltrándose en sus entrañas, quemándolas del mismo modo-nh...-Cerró los ojos con algo de fuerza, lentamente la zona se fue adormeciendo hasta que fue incapaz de sentirla. Luego fue como si el fuego regresara por donde llegó lentamente y después nada, otra vez sentía perfectamente su costado, y al tocarlo notó que ya no tenía herida.-Vaya...en verdad eres un ángel...-Y se rió de eso. Se levantó de un salto-Vaya, hasta me siento recuperado...-Se observó para asegurarse de ello.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

Ikuto observó asustado y sorprendido a la vez los procedimientos de Will, asintiendo a su petición y sosteniendo firmemente al rubio en sus brazos para que no se removiera demasiado, tarareando suavemente junto a su oido, la misma melodía que usara para calmar a su Tigre cuando lo notaba tenso. Finalmente vio como, gracias a la sangre del enfermero, las heridas del otro se curaban y cuando se levantó de manera tan intempestiva no pudo evitar reírse, aliviado, mientras se ponía en pie. A consecuencia de las heridas ajenas, su tunica estaba un poco manchada de sangre pero nada de que preocuparse. Se volvió a Will.- Muchas gracias por curar a este intempestivo animalito, Will - Le sonrió dulce y luego se volvió al rubio - Y tú... Para la proxima, empezaremos en un nivel más bajo - Señaló - Eres habil, pero te confias mucho también...- Comentó, sonriendole divertido de su animada actitud.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Rylei estaba tan maravillado con las mágicas curaciones, que apenas si hizo caso de las advertencias ajenas-Sí, sí-Le contestó, volviéndose hacia él con una sonrisa. Sorpresivamente le lamió la mejilla, y luego se alejó de ellos corriendo, para empezar a dar de brincos y volteretas en el aire, asegurándose de que ya estaba bien del todo.

Mientras tanto Will se estaba levantando también, pero tenía ocupada la vista asegurándose de que la herida de su muñeca ya se estaba curando-¿Es muy hiperactivo tu novio, eh?-Le preguntó en tono despreocupado al bibliotecario, sin voltear a verlo con una leve sonrisa, con claridad pensaba que ellos dos tenían algo por la forma en la que había visto que el peliplata cuidaba del rubio.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

Ikuto rodó los ojos al darse cuenta de que no le estaba prestando atención, pero bueno, era de esperarse despues de aquella sorprendente curación que incluso a él le había dejado un poco sorprendido. Entonces se volvió a Will para decirle algo, pero escuchar sus palabras le avergonzó por completo y le puso el rostro colorado. - Él... no es mi novio...- Murmuró bajo. Pensó que el decirle que apenas lo conocía ese día solo lo haría más vergonzoso así que no dijo nada. Procuró ignorar aquello, aunque el corazón seguía latiendole intensamente en el pecho y se volteó con el otro. - Eh, Rylei... Ya vamonos...- Le instó. No quería seguir estando junto a Will luego de ese incomodo momento.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

-¿No? Oh cuanto lo siento...que atrevido de mi parte-Se disculpó con una sonrisa avergonzada y un leve rubor le invadió las mejillas. Desplegó sus enormes alas nuevamente-Si ya no necesitan nada más, debo volver arriba...estaba cuidando a un paciente que está un poco grave-Le indicó al bibliotecario sonriendo todavía de ese modo apenado

Rylei volteó a mirarlo y volvió a su lado-Esta bien, lo siento...es que...¡fue grandioso! muchas gracias amigo-Le agradeció al arcángel que le sonrió complacido de sus elogios

-Está bien, está bien, no tienes que agradecerme nada, es mi tarea ayudar en este lugar-Le aseguró amable-me alegra que te encuentres mejor...-Se dio media vuelta y emprendió el vuelo-Hasta luego-Se despidió de ellos con la mano para luego salir volando por las puertas automáticas de la misma forma en la que entró antes.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

Suspiró aliviado cuando Will se fue, aunque se sintió un poco culpable de haberle interrumpido. de haber sabido que habia un paciente grave arriba habría encontrado las maneras de llevarselo. Se volvió entonces al rubio que quedaba y le hizo un gesto para que salieran. - Vamos, otro día volveras a intentarlo... Por ahora solo quiero cambiarme de ropa, estoy todo lleno de sangre - Suspiró y lo miró de reojo, dandose cuenta de que el otro llevaba las pocas prendas que le quedaban todas rotas, un poco más y estaría desnudo. Ello le hizo sonrojarse de nuevo. - Y por lo visto también tendremos que buscarte algo...- Musitó, señalandole, antes de adelantarse un poco para no verlo y salir de ahi, buscando meterse en el ascensor.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Rylei se sintió mal de ser el culpable de que las ropas del bilbiotecario estuvieran sucias, y lo vio pasar frente a él con la mirada agachada, prácticamente huyendo. Lo siguió en silencio y cuando estuvieron en el ascensor por fin dijo algo-Lo lamento...-Se diculpó a regañadientes, recuperando esa seriedad frívola, que generalmente con el bibliotecario desaparecía, pero en los ojos se le notaba la culpa, aunque esquivara discretamente la mirada ajena-Me excedí un poco...no habrías arruinado tu ropa si no fuera por mí...-Le aseguró-Así que...no te preocupes! no necesitas prestarme nada...puedo conseguir algo por mi cuenta-Intentó remediar un poco la situación con aquella disculpa, al terminar buscándole la mirada, preguntándose también internamente la razón de porqué no quería mirarlo, ya que seguía sin imaginarse que Will hubiera hecho ese comentario acerca de ellos.

Ikuto negó con la cabeza suavemente al escucharle, avergonzandose más.- No es tu culpa Rylei, no tienes que preocuparte por eso, además, con un poco de agua todo se quita...- Procuró sonreír para no preocupar de más al otro, ya que había notado el clima de nuevo tenso entre ellos. Pero igual no le miraba a los ojos, presentía que si lo miraba fijo el otro adivinaría lo que estaba pensando, y eso era que no podía sacarse el comentario de Will de la mente. - Pero me preocupa que andes por ahí medio desnudo, podrías terminar traumando a algún estudiante - Dijo como excusa, riendo un poco nerviosamente, estirando su mano hasta tomar la ajena. Sus mejillas estaban aún coloreadas vivamente.- Vamos, seguro podré encontrar algo que te quede y luego podemos... dar un paseo o algo...- Sugirió.

Mientras lo escuchaba no sabía exactamente como portarse, aunque el nerviosismo ajeno era prácticamente respirable para él, por aquello de que su olfato estaba más desarrollado. Así que para ayudarlo a tranquilizarse él también esbozó una gatuna sonrisa tranquila, dejando que lo tomara de la mano con naturalidad, aunque aquel gesto lo hubiera extrañado al principio. Se rió de eso de que los estudiantes se iban a traumar-Está bien...aunque sí es mi culpa, pero si tu no crees así, mejor ya no digo nada...-Y se rió de nuevo-No estoy seguro de que tu ropa me quede, estás muy delgadito...-Con su mano le demostró que fácilmente podía sujetar su cintura, y al encontrarse sus ojos dorados con los plateados, sus mejillas también se sonrojaron notoriamente.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

- Si, opino que mejor no dices nada - Exclamó, riendo de su broma, tratando de calmarse, pero no le sirvió de nada cuando de improviso pegó su cuerpo al suyo de esa manera repentina. sus ojos volvieron a encontrarse y su sonrojo, que habia estado bajando, volvió con toda su fuerza por lo que ocultó el rostro en su hombro con la excusa de que le diría algo, acercandose a penas a su oido para susurrar. - Cierto... Pero siempre podemos tomar prestada la ropa de Kyle - señaló, rozando apenas sus labios contra el oido ajeno de manera inconciente, pero cuando el timbre del ascensor anunció la llegada a la planta baja, se alejó. ¿Que rayos le pasaba? - Anda, vallamos por la ropa...- Le apremió, saliendo primero de aquella prision metalica, esperando el ser seguido por el otro mientras respiraba profundamente para calmarse, dirigiendose a su habitación.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Notó lo alterado que estaba, y apenas si brincó un poquito cuando sus labios rozaron su oído de esa forma, sus sentidos se alertaron, tuvo que esforzarse para no arquear su cuerpo como hacen los gatos. -OK...-Apenas si contestó. Empezó a seguirlo todavía sosteniendo la sonrisa en sus labios, porque su mirada estaba fija en sus caderas, se balanceaban graciosamente cuando caminaba, como las de una chica. Cuando al fin estuvieron en su habitación, que ya le era familiar, tuvo ganas de sentarse en la cama de un brinco como lo haría "Tigre", pero se quedó a medias al recordar que no podía hacer eso ya que se suponía que nunca había entrado ahí. Sólo se sentó cuidadosamente, esperando que no le pareciera sospechoso a Ikuto.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

Ikuto ni siquiera notó como le miraba el otro, o al menos fingió que no lo hacía para no terminar de enloquecer de paranoia. Llegaron a su habitación y le dio paso, cerrando luego a la puerta. - Bienvenido a mi habitación, si quieres ponte cómodo...- Le dijo, sin mirarlo mucho, yendose directo al armario para buscar con que cambiarse. Por suerte solo tenía manchada la parte superior y como el pantalón era color gris podía combinarlo con casi cualquier cosa. Mientras buscaba, le miró por encima del hombro sentado en la cama.- Imagino que esta ropa no te gustará...- Señaló su armario, lleno de prendas orientales - ¿Me ocupo de traerte las de Kyle entonces? - Inquirió, levemente travieso.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Rylei se rió de la propuesta-¿De Kyle? No estaría nada mal hacerlo rabiar cuando pase junto a él con su ropa puesta...-Pero realmente no quería otra ropa que no fuera la suya; ya que su aroma estaba impregnado en todas las cosas que usaba, por todo el cuarto, pero sobre todo, en su ropa, aunque fuera la que estaba limpia y colgada en el closet. Se levantó y fue hacia el closet-Estoy seguro que podemos encontrar...algo aquí...-Se agachó para abrir el segundo cajón, conocía los compartimientos perfectamente, ya que había jugado dentro muchas veces , pero fingió que buscaba hundiendo su mano en el cajón hasta que pescó algo-Mira...-Era una camiseta beige sin mangas, que a pesar de tener letras orientales dibujadas encima, estaba bastante holgada y se veía cómoda.-¡Qué suerte!...Es perfecta...-Se fingió sorprendido de nuevo observándola. Hundió la mano otra vez, revolvió un poco la ropa-Por aquí...-Musitó-Oh...esta es prometedora...-Sacó unas bermudas de mezclilla beige que también eran algo grandes, como para él-¿Lo ves?...¡Fue fácil!-Y fijando sus ojos en los suyos, le regaló otra felina y sexy sonrisa.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

- Empiezo a pensar que eso significa un si...- Bromeó, mientras pasaba los ganchos del armario hasta que finalmente encontró una camisa que le iba bien, de color violeta con detalles verdes y azules y la dejó sobre la cama, viendo al otro registrar en sus gabetas, las cuales estaban desordenadas por culpa de su pequeño minino, cosa que al recordarlo no pudo evitar que se sonriera. Se sorprendió sin embargo al verle sacar aquellas prendas, pero no evitó que las tomara.- Valla, había olvidado que eso estaba allí - Murmuró - Seguro han de haber quedado de los malos tiempos - Se encogió de hombros - Si quieres puedes quedartela...- Aceptó, sonrojandose de nuevo ante su sexy sonrisa. Le resultaba inevitable. - V-vale, entonces... te dejo para que te cambies, no me tardo, iré a quitarme un poco la sangre - Exclamó, señalandose los brazos manchados de sangre seca y tomó la camisa para meterse con ella al baño, cerrando la puerta, aunque esta igual quedó entreabierta, quitandose la camisa que usaba para lavarse los brazos y el rostro.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Rylei se cambió muy rápido, con los guiñapos que le quedaban de ropa no le fue difícil. Luego no pudo evitar asomarse por la rendijilla del baño, siempre hacía eso cuando estaba en su forma de gato, ya que era menos probable que el bibliotecario se diera cuenta de su presencia, pero recordó que era humano, cuando la mirada de ambos se encontró en el reflejo del espejo. De inmediato se apartó de la puerta y se quedó afuera pasmado. Rápido buscó algo con que distraer al peliplata y se encontró con unos títulos de libros en la repisa, recordó que quería preguntarle cosas acerca de él, que de gato no podía, obviamente-¿Te gusta bastante la naturaleza no?...-La mayoría eran cosas parecidas a documentales interesantes de las maravillas naturales del mundo, animales, o cosas así. Se sentó en la cama y empezó a hojearlos.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

Ikuto se estaba lavando los brazos concienzudamente, tratando de quitarse todo rastro de sangre. No le gustaba, aunque no fuera suya el solo verla le ponía algo nervioso, incomodo... Prefería no tenerla cerca. Levantó la mirada para comodarse uno de los largos mechones plateados en el espejo y su mirada se cruzó con la del rubio en el espejo, disparandole un enorme sonrojo. ¿Estaba espiandole? Procuró no ser paranóico... Además, que cuando volvió a cerciorarse no había nada. Tal vez lo estaba imaginando. Escuchó sus palabras y sonrió ante aquella pregunta. - Si, mucho... Cuando era pequeño vivía en un pueblito en el bosque que quedaba cerca de un río. Tenía que ir a buscar agua todos los días, así que me acostumbré a convivir con la naturaleza, me trae mucha tranquilidad - Le comentó con una sonrisa leve, para terminar de limpiarse los brazos y por fin poder ponerse la camisa y salir. - ¿A ti que te gusta hacer Rylei? - Le preguntó, curioso, mientras se iba frente al espejo para tomar el peine y cepillar su cabello.

Beta Mensajes : 299 Fecha de inscripción : 21/02/2011

Rylei lo observaba disimuladamente, asegurándose de que no se hubiera dado cuenta del incidente ocurrido anteriormente, pero después de un rato entendió de que en verdad no lo había notado y con un suspiro aliviado se tumbó en la cama, mirando el techo, pensado que responderle-A mí también me encanta la naturaleza...de niño, igual viví en un lugar en medio del bosque...y después en el bosque mismo-Completó riéndose de ello-Prefiero vivir así que aquí...como los humanos, encerrados entre muros de piedra...en sus mundos absurdos...los mutantes somos distintos claro, pero los humanos son todos así...ninguno aprecia realmente a la naturaleza-Comentó, recordando todos aquellos cazadores desalmados que había tenido que asesinar, o a las personas en las aldeas que eran atacadas por el ejército frente a sus ojos cuando él había estado en la milicia. Desvió la mirada hacia Ikuto para olvidarse de todo ello.

Omega Mensajes : 3362 Fecha de inscripción : 20/02/2011

- Si... es una lastima la verdad...- Musitó, con un suspiro, dejando el peine de lado para dejarse el largo cabello plateado suelto sobre un hombro, volteandose hacia Rylei. - Pero no es bueno pensar en esas cosas después de lo que acaba de pasar, ¿No crees? Además, te vez mejor cuando sonríes - Admitió, sonrojandose un poco, pero igual siguió hablando - Vamos a dar un paseo, salgamos de aqui, me siento como agua embotellada - Bromeó - Así me cuentas un poco más de tí y tu puedes preguntarme lo que quieras, ¿vale? - Aceptó, sonriendole candido y tendiendole su mano para que viniera con él.