Manzhanakaiyr
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 | Tema: Morrigan Aensland "Sadistic" (H.L.)  Vie Ene 14, 2011 8:57 pm | |
| Nombre:
Morrigan Aensland
Nombre Clave:
Sadistic
Edad:
Aparenta entre 22 y 24, pero tiene 27
Descripción física:
Altura: 1.72m, peso: 57.6kg, medidas: 83, 52,86, su apariencia es de una joven hermosa y voluptuosa, con un largo cabello color verde claro. Con una diadema de alas de murciélago, así como un par de alas de este animal en su espalda (al transformarse), de hermosos ojos verdes, del mismo tono de su cabello para ser exactos.
- Spoiler:
Características:
Usa ropa extremadamente entallada, mostrando a la perfección sus atributos femeninos, y solo en colores negro y purpura.
Lleva una cicatriz en el vientre. Un “accidente” de hace unos años.
Carácter:
Morrigan puede llegar a ser muy vana, y básicamente vivir para saborear la emoción de una batalla. Se caracteriza por ser muy arrogante, vanidosa, egocéntrica, sensual y desafiante. Es una mujer realmente sádica.
Sin embargo, con sus cercanos se torna un tanto más sensible. Si de su hermana se trata no cabe duda que es su persona más querida. Ante sus subordinados puede ser de lo más fría y cruda, pero en realidad sus momentos tiene en que los trata bien.
Poderes:
Es curioso. Requiere de una transformación para poder desarrollarlos al 100% De lo contrario, alrededor del 75% se mantiene oculto en su ser, por lo que no puede utilizarlo a menos de que una emoción fuerte lo provoque.
Ante su transformación, toma la apariencia de la que se describiría como la combinación de una joven vampiro y un demonio sexual, dígase súcubo. Con alas de demonio en su espalda y una diadema con similitud en la cabeza. Es capaz de elevarse y planear gracias a esto.
Fuero de eso, sus habilidades se tornan más bien en el uso de una fuerza descomunal, el fuego y técnicas ilusorias. Usa su cuerpo en transformación, transformando sus alas de dagas y en realidad se basa mucho en su agilidad física y conocimiento de artes de lucha.
Inclinación sexual:
Hetero
Ocupación:
Líder de la Hermandad: un grupo de mutantes rebeldes. Presidenta y propietaria de las empresas Kohl, que posee desde Hoteles, casinos, turismo y restaurantes lujosos hasta manejo del mercado negro.
Breve historia:
Al principio del tiempo en su vida, según a como ella lo recuerda, solo sabía un par de cosas. Su nombre, Morrigan Aensland, como pariente, solamente existía una pequeña pelirrosa llamada Lillith y ella, no era un Homo sapiens más. Desconoce el pasado antes de sus 15 y los siete de su hermana menor, al igual que la pelirrosa. Habían perdido la memoria y no recordaban tener nada, pero por alguna extraña razón, podían tener un control completo sobre sus habilidades.
Tuvieron un par de años difíciles en los más profundos callejones de Bronx y demás zonas de Nueva York. Morrigan había hecho grandes sacrificios durante dos años para poder cuidar de su hermana menor, al grado de utilizar sus habilidades y cuerpo para poder protegerla y llevarle lo que necesitaba a casa. Comida, ropas… todo.
En algún momento se encontró en un aprieto contra varios tipos, no podía utilizar sus habilidades a plena luz del día, lo sabía, pero arriesgado era también no hacerlo. Entonces, como en cuento de hadas, apareció un “caballero de reluciente armadura” y la ayudó. Dos años de noviazgo feliz prosiguieron hasta que, una noche, se escaparon a Las Vegas en el auto del chico, para poder casarse. Si bien, fue un buen tiempo para Morrigan, no tardó en tener problemas ante los malos vicios de su marido. Hubieron varias discusiones, peleas a golpes y demás… pero nada importaba mas que el amor que se tenían, sobre todo ella que ahora esperaba a su hijo. Su embarazo fue hermoso, pero solo duró 6 meses hasta que él ignorase por completo este hecho y, así como concebió la vida de su hijo, la arrebató directo del vientre para después huír cuando la abandonase con un divorcio en píe.
De nuevo, se tornó difícil para la peli verde el cuidar de su hermana. Pero su buen físico apoyó para que intentase hacer una carrera como modelo, al menos dando ingresos suficientes.
Entonces, un viejo rico la descubrió. Era divorciado, con una hija y ex esposa. Millonario, en busca de un nuevo amor y… Morrigan pareció gustarle. Si bien, Morrigan tenía algo era que su anterior matrimonio le había dejado una huella de modo que aún estaba frágil. Fue estúpidamente rápida la forma en la que fue envuelta por aquel hombre, que, para ser tan mayor, en realidad sí le interesó. Pero Morrigan no hubiese esperado que, después de un par de meses de matrimonio, éste hombre se atreviese a dañar tanto a su persona, tanto emocional como físicamente, explotándola de sobremanera, aprovechando su físico.
El hombre falleció. En un accidente su auto se incendió con él en el interior, de modo que murió. Por supuesto, la anterior familia del hombre culpó en un 100% a la mutante. Ella, se quedó con la mitad de la herencia, con la cual procuró a su hermana e intentó ignorar a aquellos que la acusaban de un crimen que no había cometido.
Morrigan no sufrió demasiado ante ello… ya se había hartado del abuso de ese hombre y de todos los que había conocido antes. Tanto hombres como mujeres. Se sentía cansada del abuso que notaba en contra de los mutantes, de los suyos, por lo que su ya dañada perspectiva le dio varias ideas en contra de esos seres despreciables. Al tiempo conoció a joven con los mismos pensamientos y le apoyó tanto como pudo, éste le declaró su amor, sin embargo… Morrigan se negó.
En uno de sus tantos viajes de negocios, debido al nuevo trabajo, tuvo que viajar a Nevada para atender un negocio. Dejó a su hermana unos días, pues iba a decidir si en realidad se requería su presencia o no ahí. Sin embargo, en un momento de relajación, optó por ir a uno de los tantos casinos de la ciudad, con la intensión de ver qué tenía de interesante “Las Vegas”, aunque al final optó por tomar una copa. No tardó, un apuesto joven se sentó junto a ella, le ofreció unas copas y hasta la cena… ¿quién diría que así se casual sería el encuentro para dos nuevos amantes? Mathew LeBeau era su nombre y, al igual que Morrigan, era un mutante.
Bien, un par de meses duró su relación, al grado que, por obvias razones, la hermana menor de Morrigan fue trasladada a donde ella. Lamentablemente, en una llamada telefónica de la menor a la peliverde, tocaron el tema de una posible alianza en contra de los humanos, aunque ahora Morrigan, en su plena felicidad, lo dudaba… para su mala suerte, su novio había escuchado eso de forma “accidental” y, al parecer… se aterró, para abandonarla cruelmente en su agónica tristeza.
Y es que, esa, fue la gota que derramó el vaso. Un odio rotundo se guió hacia los seres humanos, como para descargar si mal, tal cual odió a aquellos que tanto mal le habían hecho, todo lo intuyó tras un largo encierro a causa de la depresión. Empleó todo su poder económico en hacer crecer sus empresas para darle una raíz a un futuro radiante, volvió a encontrarse con un viejo conocido, un joven del cual ya se había hablado en ésta historia: Su nombre era Daeron Rood, era el mismo joven que recibió el apoyo de Morrigan, a modo que, al encontrarla poco antes de que saliese de su depresión, compartió su rabia hacia aquél que tanto la dañase y decidió quedarse con ella como su “familia” y su asistente personal, sin olvidar que un gran guardaespaldas mientras que la pequeña Lillith una confiable secretaria.
Y bien… no pasó mucho tiempo para que la mutante conociese en persona al senador de los Estados Unidos Americanos, Herb Kohl. Éste hombre se pregnó en la belleza y la mentalidad de Morrigan, mientras que la mutante se interesó en el gran poder económico, político y criminal de dicho senador. Eso le ayudaría mucho, pues así conseguiría mayor contacto en el bajo mundo, en el mundo político y en el mundo galante. Se casó con dicho senador, sin que éste supiese de sus habilidades.
Herb Kohl era un empresario reconocido, dueño y presidente de las empresas Kohl, empresas que se basaban en el comercio turístico y el placer al cliente, con restaurantes, hoteles, villas, spa y demás tipos de servicios. A éste paso, Morrigan creó un pequeño dominio a cuestas de su nuevo marido, conociendo a tanto mutante excepcional le fuese posible… sin embargo, una noche fue descubierta por su marido y éste amenazó a Morrigan. A punto de llamar a autoridades, Morrigan cometió asesinato… asesinó a su propio marido, el cual era un futuro dictador, ya lo imaginaba, pero de ésta forma, ella sería tal cosa y la poseedora de las empresas Kohl. Morrigan triunfaría y sería así como fundaría “La Hermandad”, un grupo de mutantes que va en contra de los humanos y cuya meta es destruirlos… los nuevos Nazis, podrían ser, puesto que buscarían la perfección en un mundo mutante. | |
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